La silla de trabajo tapizada Modulor se centra en sentarse de forma saludable y activa en el lugar de trabajo. La silla de trabajo tapizada Modulor cumple la norma sobre sillas de trabajo según DIN 68877 y lleva la marca GS de seguridad probada. Una garantía de 5 años y una garantía posventa de 10 años para las piezas de repuesto garantizan el uso de la silla durante mucho tiempo. La tela de tapicería de alta calidad está disponible en 10 colores estándar, con otros 18 colores disponibles bajo pedido sin coste adicional.
La silla de trabajo tapizada Modulor está construida en un sistema modular, compuesto por una base con ruedas, un resorte de gas, un soporte de asiento que contiene el mecanismo de ajuste y las dos carcasas de asiento. Todas las piezas están atornilladas o enchufadas y pueden sustituirse individualmente si es necesario. La silla está equipada con ruedas blandas para suelos duros.
El diseño ergonómico de la silla también favorece la denominada "sentada dinámica", es decir, los elementos móviles ajustables de la silla permiten cambiar con frecuencia la postura al sentarse, lo que reduce la tensión unilateral sobre los músculos y los discos intervertebrales. El respaldo regulable en función del peso se adapta a la postura de asiento respectiva, de modo que sigue los movimientos de la parte superior del cuerpo y apoya así eficazmente la columna vertebral. Por supuesto, el respaldo también puede fijarse en cualquier posición de inclinación. Además, la inclinación de la superficie del asiento, que también puede ajustarse de forma variable, permite mantener el ángulo óptimo de apertura del cuerpo de al menos 90° en función de la postura de trabajo, reduciendo así las cargas de presión en la zona de los muslos, por ejemplo.
Gracias a su diseño claro y reducido, la silla de trabajo tapizada Modulor combina especialmente bien con los sistemas de mesas Modulor.